—¿Cuidar niños tú? Sonia, ¿estás segura? Tú eres maestra y con unos cursillos de nada te habrían dado escuela. Tú eres inteligente y los sacarás cuando te lo propongas. De modo que encuentro una monstruosidad y una estupidez del destino que vayas precisamente a cuidar una niña huérfana.
—Tal vez así pueda resarcirme de esta pesadilla —dijo Sonia sin inmutarse demasiado.
—¿Pero no comprendes que eso pasó hace tres años?
—¿Tantos? A mí se me antoja que fue ayer.
—David…
No le dejó terminar.
La vio ponerse en pie y empalidecer.
—Ante mí no pronuncies ese nombre. ¿Quieres? —sin levantar la voz, pero Maite leía en aquel acento contenido una tragedia—. Por favor… te lo pido.
Description:
—¿Cuidar niños tú? Sonia, ¿estás segura? Tú eres maestra y con unos cursillos de nada te habrían dado escuela. Tú eres inteligente y los sacarás cuando te lo propongas. De modo que encuentro una monstruosidad y una estupidez del destino que vayas precisamente a cuidar una niña huérfana. —Tal vez así pueda resarcirme de esta pesadilla —dijo Sonia sin inmutarse demasiado. —¿Pero no comprendes que eso pasó hace tres años? —¿Tantos? A mí se me antoja que fue ayer. —David… No le dejó terminar. La vio ponerse en pie y empalidecer. —Ante mí no pronuncies ese nombre. ¿Quieres? —sin levantar la voz, pero Maite leía en aquel acento contenido una tragedia—. Por favor… te lo pido.