El hombre caminaba rápidamente por la acera, echando de cuando en cuando miradas aprensivas hacia atrás.
Bill Muggs temía ser seguido. Era un hombre de aspecto más bien corriente y se confundía fácilmente con la multitud que pululaba por las aceras de la gran urbe.
Nadie se fijaba en él. Cada cual caminaba a sus propios asuntos. Los de Muggs tenían poco de honestos.
Abandonó la gran avenida y se metió por una calle transversal, en donde el tránsito y el bullicio eran menores. Muggs no se atrevía siquiera a tomar un taxi.
Description:
El hombre caminaba rápidamente por la acera, echando de cuando en cuando miradas aprensivas hacia atrás. Bill Muggs temía ser seguido. Era un hombre de aspecto más bien corriente y se confundía fácilmente con la multitud que pululaba por las aceras de la gran urbe. Nadie se fijaba en él. Cada cual caminaba a sus propios asuntos. Los de Muggs tenían poco de honestos. Abandonó la gran avenida y se metió por una calle transversal, en donde el tránsito y el bullicio eran menores. Muggs no se atrevía siquiera a tomar un taxi.