La resolución de conflictos es necesaria para contribuir a crear un ambiente laboral más agradable. Es normal que, cuando trabajas con otras personas, surjan pequeños roces, desavenencias o incluso animadversión, pero si sabemos cómo analizar estas desagradables situaciones y actuar de la forma más constructiva posible, nos sentiremos más a gusto en nuestro entorno laboral.
Desde las disputas de poder hasta las guerras abiertas entre clanes, pasando por los correos electrónicos asesinos, los comentarios desagradables y las broncas, ¿cómo reaccionas? ¿Los evitas? ¿Los afrontas? ¿Compites? ¿Te acomodas? ¿O colaboras? Es importante que entiendas tus propios mecanismos de funcionamiento y que te conozcas bien. Así, estarás preparado para reaccionar de forma más adulta, respetuosa con el otro y con su punto de vista. Instaura un clima de diálogo y perseguid vuestros objetivos comunes. ¡Conviérte en un conciliador y disfruta trabajando en un ambiente laboral saludable!
<ins>Te ofrecemos las claves para</ins>:
analizar las relaciones conflictuales que vives en el trabajo, desde la identificación del problema hasta la elección de una solución;
entender cómo los diferentes perfiles de participantes implicados influyen en el desarrollo del conflicto;
distinguir un conflicto cognitivo de un conflicto relacional;
recuperar un buen ambiente de equipo;
aplicar de manera idónea las técnicas propuestas partiendo de una visión holística del conflicto;
Description:
La resolución de conflictos es necesaria para contribuir a crear un ambiente laboral más agradable. Es normal que, cuando trabajas con otras personas, surjan pequeños roces, desavenencias o incluso animadversión, pero si sabemos cómo analizar estas desagradables situaciones y actuar de la forma más constructiva posible, nos sentiremos más a gusto en nuestro entorno laboral.
Desde las disputas de poder hasta las guerras abiertas entre clanes, pasando por los correos electrónicos asesinos, los comentarios desagradables y las broncas, ¿cómo reaccionas? ¿Los evitas? ¿Los afrontas? ¿Compites? ¿Te acomodas? ¿O colaboras? Es importante que entiendas tus propios mecanismos de funcionamiento y que te conozcas bien. Así, estarás preparado para reaccionar de forma más adulta, respetuosa con el otro y con su punto de vista. Instaura un clima de diálogo y perseguid vuestros objetivos comunes. ¡Conviérte en un conciliador y disfruta trabajando en un ambiente laboral saludable!
<ins>Te ofrecemos las claves para</ins>: