La red parecía tener vida propia. Era como un extraño monstruo entrelazado, sinuoso y sutil, que al contacto con la sudorosa piel humana, empezara a contraerse y espesarse, adherido al cuerpo que pugnaba en vano contra aquella amenaza caída del vacío nocturno.
Description:
La red parecía tener vida propia. Era como un extraño monstruo entrelazado, sinuoso y sutil, que al contacto con la sudorosa piel humana, empezara a contraerse y espesarse, adherido al cuerpo que pugnaba en vano contra aquella amenaza caída del vacío nocturno.